Hoy
damos la bienvenida al mes de Diciembre con una entrada que no tiene nada que
ver con ninguna cosa hecha por mi,
pero la verdad es que llevaba ya tiempo queriendo enseñaros algo y por una cosa
y por otra, no terminaba de hacer las fotos
para poder hablar de ello.
Hace
ya algunas semanas, recibí un regalo de
cumpleaños con un poco de retraso por parte de mi hermana. Se trataba de algo que había descubierto hace poco
porque lo vi en alguna página de Facebook de las que soy seguidora (ahora no
soy capaz de poner en pie dónde lo vi…). Y decidí que iba a ser una de las
cosas que añadir en mi “carta a los Reyes Magos” de este
año.
Pero
mira por dónde, mi hermana se ha adelantado y me ha llegado el regalito con
antelación.
Se
trata de un libro muy original, que
puede recordarnos a los libros que solíamos usar de pequeños, en los que
coloreábamos página tras página. Esta es una versión pensada para lo mismo,
pero para adultos que echan de menos su lado más infantil y creativo ;-).
Y
además, la idea es usarlo como terapia
en momentos de estrés, usando los
colores y el libro como forma de canalizar nuestros momentos negativos.
Aquí
os dejo algunas fotos del libro,
para que os hagáis una idea de cómo es:
Esto que os enseño es sólo una muestra de todo lo que trae, ya que son en total 100 láminas, todas distintas. Así que si os ha entrado el síndrome “culo veo, culo quiero”, ya sabéis el título del libro para que podáis pedirlos en vuestras propias
cartas a los Reyes Magos o para haceros un autorregalo.
Yo
aún no he empezado con él, pero estoy deseando encontrar algún que otro ratito
para poder darle vida a este libro
tan original. Así que cuando tenga algo hecho, a ver si me acuerdo y os voy
enseñando el resultado de mis ratos de desestresamiento,
que os puedo asegurar que teniendo dos niños son más de uno y de dos los
momentos en los que lo voy a necesitar ;-)
Besos
y hasta la próxima entrada.
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